Zarpa de Bosque sintió una increíble presión sobre sus omoplatos en algún momento dado en aquella tortura llamada “Forzandose a interactuar”.

Al levantar la mirada noto que ambos gatos a los que se le había intentado acercar la estaban mirando, la aprendiza naranja levanto las orejas y abrió los ojos en sorpresa, como si la hubieran atrapado.

Zarpa de Bosque miro por encima de su hombro y… ¡Lluvia Escarchada también la estaba viendo! La de tonos naranjas se erizo al ver a su mentora viéndola desde la distancia, su mentora no se guardaría sus comentarios, seguramente le diría a Nube de Granizo sobre lo que estaba pasando aquella noche.

Como si las cosas no fueran peor, aquel gato con la cual la forzaban a interactuar la llamo, Zarpa de Bosque dirigió la vista a donde ambos con una mezcla de sorpresa y terror, se sentía demasiado avergonzada como para hacer algo más que pegar las orejas al cráneo mientras aquel gato le seguía hablando.

— Yo….- Apenas logro soltar antes de que notara que sus palabras en concreto.- Es que… Nunca eh hablado con alguien fuera de mi clan, es mi primera asamblea y… M-mi líder insistió en que viniera.

Sintió un peso menos en el pecho al hablar, aunque había intentado no hablar rápido como cuando lo hacia cuando estaba nerviosa, era imposible no ponerse así, apenas interactuaba con otros gatos de su clan y ahora la estaban obligando a platicar con desconocidos.

La felina empezó a caminar en dirección a ambos gatos con la cabeza baja y las orejas agachadas.

— S-soy Zarpa de Bosque, soy del Clan del Río.- Maullo.- Lamento haberlos interrumpido, mi mentora insistió en que me acercara a ustedes.

Zarpa Quebrada se sentía cada vez más abrumada por la ráfaga de elogios que recibió por parte del guerrero joven. Avergonzandose aún más cuando este se le acercó, susurrándole juguetonamente que se cuidara más. La gata desvío la mirada hacía un lado con las orejas rojas de vergüenza. Limitándose a decir un:
G-gracias... L-lo tendré en cuenta... Salpicadura de Trucha Sin poderse centrar muy bien en lo que pasó después se limitó a escuchar como su amigo provocaba y animaba a la pequeña aprendiz naranja a que se les uniera. La miró de nuevo y le sonrió, con una expresión cálida y amigable, le hizo un gesto para que se les acercara.
Zarpa de Bosque, que bonito nombre!...y descuida, también es mi primera asamblea! Cómo dijo él, soy Zarpa Quebrada, del Clan del Trueno... Él es Salpicadura de Trucha, del Viento. Es un gusto conocerte... respondió cuando la joven habló, ignorando el comentario de que su mentora la había obligado, la pobrecita debía estar aterrada de que le hubieran asignado tal tarea, pero bueno,era lo de menos si estaba entrenando para ser una guerrera. Quería preguntarle más pero observó como llegaba el tan esperado Clan de la Sombra al claro, su líder, sin perder el tiempo, tomó su lugar y dió comienzo a la asamblea.
Oh vaya ... Bueno,parece que ya va a empezar... Zarpa de Bosque, quieres quedarte con nosotros a escucharla? Venga, desde aquí tenemos una buena vista. ya la aprendiz se estaba acercando pero Zarpa Quebrada le pasó una pata por sobre el omóplato y la acercó a sí misma, con un ronroneo amistoso. Los tres gatos juntos escuchando las noticias que estaba comenzando a anunciar la líder del Clan de la Sombra.

Estrella Helada fijó su mirada fría sobre las multitudes que se abrían paso ante la presencia tardía de Estrella de Sauce. Vaya falta de respeto, su Clan había hecho el esfuerzo de cumplir con su deber de presentarse en tiempo y forma y parecía que la sed de puntualidad no era algo que corría por parte del Clan de la Sombra. Observó como la gata grisácea tomaba su lugar para dar comienzo a la ceremonia finalmente. Sus palabras parecían calmas, inusualmente calmas para la vergonzosa situación que había protagonizado.

Mientras Estrella de Sauce hablaba, la imponente líder del Clan del Viento ocultaba su escucha a medias, prestando más atención a la lista de eventos que recorrían su mente lista para tomar la palabra apenas le fuese posible. Hizo una nota mental de la noticia de un gran zorro rondando por el territorio, que había causado la muerte de un joven guerrero, y no pudo evitar pensar en Ala de Halcón, quien había fallecido igualmente hacía muy poco. Apenas se hizo silencio, su voz se oyó en el lugar:

—El Clan del Viento se ha recuperado maravillosamente tras la última estación. Remarco la fortaleza de mi Clan.— irguió la cabeza con orgullo y continuó —Las presas continúan brindandonos la saciedad necesaria para afrontar el porvenir, y además, contamos con un nuevo guerrero, Salpicadura de Trucha, quien ha demostrado ser una adición valuable en nuestras filas— su sonrisa sutil se desvaneció al pronunciar las palabras siguientes. —Lamentablemente, Ala de Halcón se encuentra cazando con el Clan Estelar.—

Pero eso no era todo, se permitió una pausa antes de maullar nuevamente —Y, gracias por el aviso, Estrella de Sauce. Deberías tener cuidado si efectivamente hay un zorro rondando. Desde la última luna he detectado el aroma de un gato del Clan de la Sombra muy cerca del límite con el Clan del Viento.—

Tras estas últimas palabras, entrecerró sus ojos azules y cedió la palabra al siguiente líder.

Cuando el Clan de la Sombra finalmente hizo su aparición en el claro rápidamente irguió su postura, había estado esperándolos por lo que parecía una eternidad tanto que había contemplado acostarse en la rama en la que estaba, ahora con una silueta más firme se limitó a observar con intriga a Estrella de Sauce que no parecía siquiera tener prisa por subir al árbol. La saludó cordialmente, un pequeño gesto con la cabeza para dejarse de palabras y permitir el comienzo a la Asamblea que tanto ansiaba, lamentablemente, no fue Estrella Rota el que había dado comienzo, si no que fue la misma líder de la Sombra quien apenas pudo sentarse dió las noticias de su Clan, ¡Qué falta de respeto! No parecía haberle importado la escena que acababa de armar, tratando de pasarla como si hubiesen sido los primeros en llegar. El líder del Río no pudo evitar sentir cierta frustración ante lo que estaba escuchando, su pelaje levemente erizado mientras intentaba enfocarse en las noticias que eran anunciadas; cuando había terminado, fue la líder del Viento quien siguió hablando, parecía que habían olvidado la más mínima pizca de órden dada la ocasión pero al menos Estrella Helada había llegado a la par que su propio Clan, no podía molestarse en guardar un rencor inexistente ante la imponente líder marrón.
A su vez que escuchaba las noticias, notó que los clanes mencionados habían perdido a algunos guerreros y su mente divagaba a la silueta de Fronda, aquella gata tan carismática ahora sólo brillará entre las filas del Clan Estelar, ciertamente era un tiempo difícil en los demás territorios si aquella era la noticia que podían compartir. Volviendo en sí para tratar de recobrar noción de lo que la líder del Viento tenía para decir, la última noticia hizo que moviera la cola en una mezcla de intriga y desaprobación, ¿El Clan de la Sombra cruzando fronteras? ¿Será que habrán tardado por alguna clase de inconveniente relacionado? Terribles noticias esperarían las fronteras si resultaba así. Una vez Estrella Helada terminó de hablar decidió que sería un buen momento para anunciar las noticias más novedosas del Río, no sin antes fulminar con la mirada a la líder de la Sombra y dedicarle unas palabras:

–¡Qué modales, Estrella de Sauce! Si querías perderte la Asamblea era mejor haber mandado un aprendiz a darnos el mensaje, claro no hay nada más importante que esta tregua, ¿O sí?– Cuestionó con más interés del que le gustaría antes de dirigirse a los gatos presentes.

–Es un placer anunciar que las presas abundan en el Clan del Río, hemos sido bendecidos por el Clan Estelar que nos ha brindado gatos de distinguida fuerza y gracia. Melena de Ortiga ha concluido su entrenamiento y se convirtió en la mejor guerrera que haya visto ¡Un talento nato sin dudarlo!, también me enorgullece anunciar el nombramiento de una nueva aprendiz: Zarpa de Bosque. ¡El Clan del Río prospera ante la adversidad!.– Anunció lleno de orgullo, haciendo una breve pausa para tomar un suspiro profundo antes de proseguir con algo menos agradable. –Lastimosamente, tenemos en común las noticias igual de lamentables pues tuvimos la pérdida de una de nuestras guerreras, Fronda se unió a las filas del Clan Estelar. Recordándonos que no debemos bajar la guardia ante estás estaciones frías y crueles.–

Finalizó, dándole una señal con la cola al líder del Trueno para compartir las novedades del Clan vecino, o, en el peor caso compartir sus pensamientos ante el lío que acababan de presenciar.

Lluvia Escarchada observó como por fin se dignaba a aparecer el Clan de la Sombra... Demasiado tarde para su gusto, la líder del Clan atravesando horondamente y sin prisas el claro hasta llegar al árbol donde se encontraban los otros líderes. Por si no fuese poca cosa, tuvo la audacia de comenzar ella la asamblea y dar sus noticias primero. ¡Pero qué falta de respeto! Según las costumbres y modales, el clan del Trueno o del Río... Incluso el del viento tenían derecho de pasar antes... Ellos debían ser los últimos ya que habían llegado tan tarde.

Realmente le causaba algo de curiosidad aún así, por lo que prestó atención a las noticias, pero al final la líder no mencionó nada sobre porqué habían llegado tan tarde, al contrario... Solo dijo elogios al clan, para representarlo fuerte ante el resto. Tomó notas interiores sobre lo del zorro suelto, si osaba acercarse al Clan del Río ella misma lo defendería con garras y dientes. La lamentable muerte de algunos guerreros, aunque no era cercana a ellos, la hizo hacer un gesto con la cabeza en señal de respeto, cerrando los ojos por unos instantes. La hizo recordar el suceso de Fronda con mucho dolor en el pecho.

El Clan del Viento prosiguió y, parecido al reporte del Clan de la Sombra, también habían perdido a uno de sus guerreros, Ala de Halcón. Lo que le llamó la atención fue la última noticia... O más bien advertencia de Estrella Helada hacia la líder del Clan de la Sombra... Así que el rastrero clan no había estado respetando las fronteras... Interesante...

Finalmente llegó el turno de su líder, Estrella de Serpiente, de dar su reporte. Escuchó cómo anunciaba orgulloso el nombramiento de Melena de Ortiga, su hija adoptiva, sonrió divertida cuando esté dijo que era la mejor guerrera, claramente su favoritismo hacia su pequeña se le notaba. También anunció sobre Zarpa de Bosque, la guerrera volteó a mirar a su aprendiza, que ahora estaba junto a los dos jóvenes de diferentes clanes, escuchando la asamblea. Se sentía algo orgullosa ahora que la anunciaban, aunque la aprendiza no mostraba un talento innato o motivación o progresos remarcables, estaba segura que algún día sería una gran guerrera, ella la haría así. Finalmente Estrella de Serpiente anunció la pérdida de Fronda, su vista se dirigió automáticamente hacia Pantanoso, cargada de pena y empatía, podía sentir el dolor del contrario desde que ocurrió el suceso, y lo mismo había causado que este último cambiara totalmente su forma de interactuar con el resto del Clan, se había cerrado a los demás. Disipó sus pensamientos prestando atención ahora a Estrella Rota, quería escuchar las noticias que este tenía que dar.

Estrella Rota vio llegar al Clan de la Sombra y, sin mucho ánimo, saludó a Estrella de Sauce cuando terminó de subir a la rama correspondiente.
Esperó que los líderes terminaran de dar sus noticias, y el amarronado notó que todos los clanes habían sufrido pérdidas de guerreros, algo que era extraño de por sí y que todo sucediera casi la misma luna... un escalofrío recorrió la espalda de el líder, resultaba escalofriante las maneras en la que el Clan Estelar se manejaba, pero probablemente así debía ser, pues, él no había perdido un guerrero durante aquella estación. Eso debería ser porque todo lo estaba haciendo bien, quizá aquella noche el Clan Estelar estuviese de su lado aquella noche.
Absorto entre sus pensamientos y tantos nombres, Estrella Rota tenía uno específico en su mente... Zarpa Solar. Tenía un nombre similar a uno de sus guerreros que había escapado, pero Estrella de Sauce no estaría albergando a un traidor, ¿Verdad? Una punzada se sintió en su estómago, tan fuerte como si un mismísimo conejo le hubiese dado una patada para alejarlo de él.
Estrella Rota tenía su mirada clavada en la líder del Clan de la Sombra, y el resto de noticias pasaron a un segundo plano cuando ató los cabos sueltos.

—Veo que sus clanes han sufrido varios infortunios esta luna —maulló fuerte y alto— , pero en cambio, el Clan del Trueno está prosperando incluso con los desafíos que implican esta estación. El Clan Estelar nos ha bendecido con una numerosa camada de cachorros, seis hijos de dos de nuestros mejores guerreros.—

El líder sonrió orgulloso de sí, y procedió a enroscar la cola entre sus patas —También, como muchos han podido notar, Ronroneo Raudo nos acompaña hoy como mi lugarteniente en lugar de Crepúsculo Nocturno. Él se ha retirado tras servirme durante todas estas lunas desde que recibí mis nueve vidas, dando paso a que una valiente y fuerte guerrera como Ronroneo Raudo sea quien cuide de mi clan cuando yo ya no esté —dijo tranquilamente, sus bigotes se movían de arriba a abajo cada que hablaba, ya que su boca se movía lo suficiente para que hasta el guerrero más distraído lo oyese.

—Lamento mucho sus pérdidas, pero Estrella de Sauce, tú posees algo que nos pertenece, al Clan del Trueno —su voz no temblaba, una señal clara de la ira del líder— . Zarpa Solar fue un guerrero del Clan del Trueno, ¡Y tú lo estás albergando! —el amarronado siseó y bramó hacia la líder.
En sus ojos no se veía el miedo que sentía porque Zarpa Solar revelase información sobre su campamento, sino la ira de la traición que sentía por el mismísimo guerrero y por Estrella de Sauce, quien parecía estar acogiendo a gatos descarriados.

—Y no descansaremos hasta recuperarlo —bramó el líder antes de bajar de la rama y caminar entre los gatos debajo suyo— ¡Esta asamblea se acabó!